Una vez más, varios medios de comunicación exhiben la vileza, la insensibilidad y el poco profesionalismo con el que ejercen el oficio periodístico, todo por la urgencia de ganar clics y convertirse en tendencia, sin importar que con ello contribuyan a destrozar la dignidad y la buena reputación que hasta hace unas horas tenían tanto Rafa como Julión (sí, también este último tenía una buena imagen, aunque a muchos no les guste su música, ese es otro asunto). Aquí unos ejemplos:
Carmen Aristegui, para variar, aprovecha la noticia para golpear al presidente Peña Nieto, pero de una manera burda, como lo hace cualquiera de los millones de haters que opinan y descargan su frustración en las redes sociales. Carmencita postea en Twitter (un tuit que tiene fijado, por cierto) un video de 36 segundos, donde primero señala cuáles fueron las dependencias encargadas de la investigación, con imágenes de Julión Álvarez de fondo y una musiquita dramática e inquisidora, como para dejar en claro que Julión es el malo de la película; y después, sin sentido alguno, hay un corte directo a un acto oficial donde el presidente de México elogia al cantante grupero, quien me imagino fue invitado. La intención del video es clara: "Ya ven, Peña Nieto es amigo de un despreciable delincuente ligado al narcotráfico". Bajo esta lógica, entonces los millones de aficionados al futbol que hemos coreado y vitoreado los goles de Rafa Márquez en la Selección Nacional, también somos despreciables por haberle hecho reverencias a un presunto delincuente. Muchos otros medios hicieron lo mismo, pero ninguno de manera tan efática y con una intención tan clara de golpear al presidente, como Aristegui Noticias.
Otro botón de muestra es Publimetro, medio que se subió sin pudor alguno al tren de mame publicando "notas" que no son notas, tan cobardes e insensibles como esta: "Crueles memes atacan a Rafa por supuesto nexo con el narco". Es decir, el diario se "compadece" de Rafa, pero difunde sin empacho las burlas que circulan en redes sociales. Es claro que no les importa la ética periodística, sino las vistas, los likes, las veces que se comparte su contenido basura. Miserable por donde se le vea.
Otro ejemplo más, no tan abyecto como los dos anteriores, es el de la editora de Huffpost México, Laura Raquel Manzo, quien publicó su opinión al respecto bajo el insidioso título: "No podemos llamarlo de otra manera: si Rafa Márquez está con el narco, es un traidor". O sea, lo llama "traidor", peeeero, solo si está con el narco. ¡Ah, menos mal!, y yo pensando que era un título amarillista. El texto sigue la misma línea, es básicamente un lamento desgarrador porque se cayó a pedazos el ídolo del futbol; claro, siempre y cuando sean verdad todas las acusaciones, algo que tardará bastante tiempo en saberse. Y así, varios periodistas se aventuraron a emitir un jucio sobre Rafa Márquez, la mayoría de ellos apenas le conceden -tibiamente- el beneficio de la duda, pero en el discurso, dan por hecho que es culpable.
Por lo pronto, Rafa ya hizo lo que casi nadie hace en estos casos: dar la cara. Y no solo negó categóricamente las acusaciones en su contra, sino que se presentó a declarar voluntariamente a la PGR.
A lo largo de su carrera, Rafa Márquez ha demostrado ser un hombre íntegro y de convicciones, lo que menos se merece es este juicio mediático. Honestamente, creo que es inocente, sin embargo, es muy probable que haya sido embaucado por gentes cercanas a él en las que confiaba. Ojalá que pueda comprobar su inocencia, lo peor que le puede pasar a este país es perder la esperanza.